Descripción
Las celdas de presión de tierra se construyen a partir de dos placas de acero inoxidable, soldadas entre sí en torno a su periferia. Este espacio anular entre las placas se llena al vacío por el aceite desaireado.
La almohadilla de presión está conectada por medio de un tubo de acero inoxidable al transductor formando un sistema hidráulico cerrado. Una señal eléctrica proporciona la presión aplicada la cual puede ser leída de forma remota en una variedad de unidades de lectura portátiles o registradores de datos.